"UN SOLDADO NUNCA SE ENTREGA"

Julián Melgarejo Insfrán fue un luchador social que durante mucho tiempo se enfrentó al régimen de Alfredo Stroessner; tras la huelga general de trabajadores de 1958, comenzó una persecución que lo llevó a exiliarse a Chile y Argentina. Tras varios años, volvió al país, donde falleció luego de años de lucha. A partir de ese momento, su hija decidió dar a conocer su historia y, con su madre como compañera, habilitó el Centro de las Memorias que lleva su nombre.

María Beatriz Melgarejo emprende desde hace varios años una lucha contra el olvido. Luis Meza.

Son las 8 de la mañana, cae una tenue llovizna en la ciudad de Villa Elisa. Eso no es impedimento para que María Beatriz Melgarejo Giménez –o Marilyn, como la conocen sus vecinos- nos reciba en el espacio donde expone aquellos dolorosos recuerdos de la dictadura stronista.

¿Hace cuánto tiempo comenzó su lucha?

Después del fallecimiento de mi papá, un día le dije a mi mamá que en memoria de mi padre quería hacer algo, porque a nuestro pueblo le hace falta conocer todo lo que se pasó en la dictadura para que esto no se repita más. Me autorizó y abrí este espacio en mi casa en memoria de mi papá.

¿Hace cuántos años funciona el centro?

Y… hace años, mi memoria no está en condiciones para decirte en qué año se abrió. Pero te digo que, tras la muerte de mi papá, este centro se habilitó.

¿Qué le inspiró a habilitar este espacio?

El ver a mis conciudadanos ignorantes de lo que realmente pasó durante la dictadura y con la idea de que esto nunca más se repita, porque es perjudicial para el país y es muy triste para la gente.

¿Cómo fueron los inicios del centro?

Al ver la actitud de la gente, le dije a mi mamá “Nosotros tenemos que poner algo acá. Papá tiene muchos documentos y yo estoy en contacto con organizaciones de DDHH, entonces voy a pedir apoyo para que esto se conozca y para que nunca más se vuelva a repetir una dictadura en el país”. Así nació y, como te digo, le puse el nombre de mi papá porque él merece ser recordado ya que fue una persona de lucha. Él nunca retrocedió un paso por su país.

Una valija con muchas historias: la fiel compañera de Don Julián
durante el exilio. Luis Meza.

¿Cuantos objetos históricos, aproximadamente, se tienen aquí?

No sé cuántos, pero son muchos. Fotografías que me han facilitado las organizaciones de DD.HH. y… No sé exactamente cuánto material tenemos. Porque libros que también tenemos acá hay muchos. También contamos con fotografías que hablan de nuestra lucha.

¿Recibió apoyo de algún ente en este proceso de lucha?

La municipalidad de Villa Elisa ha reconocido este sitio como de interés cultural y también estoy en contacto con diferentes organizaciones de DD.HH., aunque hace un tiempo que no estoy activando porque mi madre estuvo un poco enferma, entonces no podía dejarle mucho tiempo, ya que ella era mi soporte en mis salidas, participaba de reuniones, gestionando incluso el cobro de indemnizaciones para las víctimas de la dictadura. Nunca cobré un centavo, ya que mi aspiración no es económica. Solo quiero concientizar a la gente para que esto no se repita.

¿Cree que nuestra generación está un poco desinteresada en la historia de nuestro país?

Algunos sí están desinteresados, pero cuando yo empecé a incursionar en los colegios, a dar charlas en las instituciones, ahí me abrieron las puertas y vi el interés de los alumnos. También comprobé el desconocimiento, porque cuando yo me presentaba, se quedaban con los ojos abiertos como diciendo “¿Y esto qué es?”. Después, al escuchar la historia, los relatos, lo que pasó durante la dictadura… Se quedaban con la boca abierta, y yo con la conciencia tranquila de que voy llevando la historia de lo que pasó realmente para que nunca más se repita esto. En las charlas que suelo dar a los niños y a los adolescentes, también me baso en el tema de la familia, porque allí es donde suele empezar la violencia. Hay padres y madres violentos que someten bajo violencia a sus hijos… Eso trae consecuencias malas, porque el día de mañana ese niño va a ser igual o más violento que sus padres; entonces siempre toco el aspecto de la familia junto al tema de la dictadura.

¿Qué siente al ver personas que reivindican la dictadura stronista?

Me da mucha lástima, porque no saben lo que están haciendo. Eso para mí significa que debo salir otra vez a las calles, visitar los colegios, concientizar a la gente. Esa es mi lucha.

¿Alguna vez pensó en bajar los brazos?

No, nunca. Aún mantengo ese espíritu de cuando era jovencita. Ahora ya tengo 62 años, pero tengo ese espíritu de no bajar los brazos, porque yo me considero un soldado de la patria; y un soldado nunca se entrega.

¿Tiene algún proyecto a futuro?

En el Centro de las Memorias uno puede encontrar una gran variedad
de artículos referidos a los años de dictadura. Luis Meza.

Proyecto a futuro… Me hubiese gustado que a nivel de la educación esto sea reconocido de interés educativo. Fui hasta el Ministerio de Educación y me pidieron que presentara un proyecto. Yo lastimosamente no estoy en el tema de proyectos.  Me quedé ahí, porque yo no sé hacer proyectos, pero eso también está en la mira. De repente puedo encontrar a alguna persona que quiera hacerme ese trabajo y entonces estaré presentando el proyecto al Ministerio para que tenga ese reconocimiento, porque esto es importante, esto se debe conocer. Y acá estamos, como se dice, como un soldadito firme sin claudicar.

¿Qué consejo daría a los jóvenes?

Primero, el conocer sus derechos. Segundo, defender sus derechos ante cualquiera, sea quien sea. Pero para eso hay que portarse bien, hay que dar el ejemplo. Defender los derechos no significa ir a gritar por gritar… No, es respetar a los demás y hacer que me respeten. Eso se empieza, como decía antes, en la familia. Si mi papá o mi mamá es violento, debo hacerle un alto a ambos y decirles que no hay necesidad de violencia para intercambiar opiniones. La violencia está mal, porque inculca más violencia en las personas. Otro consejo es no tener miedo, porque de repente podemos tener situaciones en las que alguien nos grita fuerte y agachamos la cabeza. Tampoco es necesario agarrar una pistola y enfrentarse… Para eso está la palabra.

+INFO

Centro de las Memorias "Julián Melgarejo Insfrán"

• Se encuentra habilitado al público de lunes a domingos las 24 horas.
• Dirección: Acaray entre Von Polesky y Ñeembucú - Villa Elisa.
• Contacto: (0981) 54 90 69 - María Beatriz Melgarejo.